Publicado el 17 déc. 2024
Situada al otro lado del mundo, a más de 19 000 kilómetros de Francia, Nueva Zelanda es una tierra ancestral llena de sorpresas. Compuesta por dos islas distintas, ofrece a los viajeros una multitud de lugares, todos más sorprendentes que los demás. Paisajes impresionantes y una cultura maorí muy fuerte, descubre esta increíble isla donde la naturaleza ocupa un lugar muy importante. Tan importante que en 2017, el Parlamento otorgó personalidad jurídica al río Whanganui, que fluye a lo largo de 290 kilómetros en la isla Norte. Para no perderte nada durante tu viaje a Nueva Zelanda, aquí tienes las 10 cosas que ver en la isla Norte de Nueva Zelanda.
Si llegas por el aeropuerto de Auckland, no te saltes esta ciudad que reserva muchas sorpresas. Entre los rascacielos, que marcan el corazón urbano de la ciudad, no podrás pasar por alto la Sky Tower, esta torre de 327 metros de altura, que domina Auckland con una vista impresionante sobre el puerto. Es posible visitarla y subir gracias a su ascensor y su suelo de cristal. Podrás comer o tomar una copa allí, y para los más atrevidos, ¡incluso es posible saltar al vacío con cuerda elástica desde la plataforma exterior (Skyjump) o dar la vuelta (Skywalk), atado con un arnés, por supuesto!

Auckland es también un conjunto de islas como la isla Waiheke, reconocida por sus diversas viñas y degustaciones de vinos neozelandeses, o la isla volcánica deshabitada de Rangitoto, verdadero santuario de especies de flores y aves.
Situado en la punta de la isla Norte de Nueva Zelanda, el Cabo Reinga es definitivamente el faro del fin del mundo. En el camino hacia el Cabo, podrás descubrir la Ninety Mile Beach, una playa que en realidad se extiende a lo largo de 90 kilómetros (es decir, 56 millas) ¡donde está permitido conducir! Así que no te sorprendas de ver huellas de neumáticos en la arena y, sobre todo, no te pierdas este itinerario atípico para llegar al fin del mundo.

En la península de Coromandel, podrás descubrir la famosa playa de Cathedral Cove (la cala de la catedral) con su arco rocoso. Si te gusta lo pintoresco, dirígete a Hot Water Beach: con tu pala, solo tienes que cavar en la arena a ciertas horas específicas para tomar un baño caliente, ¡incluso muy caliente!

La ciudad de Tauranga y su puerto son un soplo de aire fresco donde las actividades marinas despiertan el interés de grandes y pequeños. Salidas al mar para pescar u observar delfines, o simples paseos por la orilla del mar, Tauranga es una verdadera pausa durante un road trip por la isla Norte. A pocos kilómetros de allí, no te pierdas Mount Maunganui, un lugar ideal para surfistas y una subida al monte imprescindible para admirar la increíble vista sobre la península.
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✔️ Hike up Mt Maunganui ?: @amberaulelei
Una publicación compartida por Tauranga Bucket List (@taurangabucketlist) el 10 dic. 2017 a las 12:13 PST
Parada imprescindible durante tu viaje por la isla Norte de Nueva Zelanda, Rotorua es reconocida por albergar una cultura maorí muy rica y una actividad geotérmica muy fuerte. No te pierdas la visita a un pueblo maorí y déjate tentar por su cocina tradicional donde los platos se cocinan en el hangi maorí, un horno cavado directamente en la tierra. Explora el Parque Nacional de Wai-O-Tapu donde los diferentes componentes químicos que emergen del suelo te ofrecerán una paleta de colores increíble. Sin embargo, ¡cuidado con el olor a huevo podrido que se siente en toda la región, debido al azufre!

Taupo alberga el lago más grande de Nueva Zelanda. Esta región es sinónimo de aventura y actividades de todo tipo como paddle, canoa, rafting o jet boat al pie de las Huka Falls para los amantes de las actividades acuáticas, o para los más atrevidos, salto con cuerda elástica o paracaidismo justo sobre el lago.

Aficionado a las caminatas o no, el Parque Nacional de Tongariro es imprescindible en tu estancia en Nueva Zelanda. Ofreciendo paisajes impresionantes, el parque está compuesto por tres volcanes aún activos. Esquí en invierno y senderismo en verano, este entorno idílico gustará tanto a los aventureros como a los más tranquilos de nosotros. Es en este parque donde se rodó parte de la famosa "El Señor de los Anillos". Reconocerás los paisajes impresionantes de la película de culto.

La Bahía de Hawke se caracteriza como la región más productora de vino en Nueva Zelanda. Gracias a su clima cálido y seco, muchas bodegas podrán recibirte para degustar sus diferentes vinos. También es el centro Art Déco del país, debido a un terremoto que destruyó la mayor parte de la bahía. La reconstrucción de las ciudades en los años 30 dejó una arquitectura particular, como en la ciudad de Napier que organiza cada año un festival Art Déco donde los coches y disfraces de la época salen a la calle. También disfrutarás de los grandes espacios y las caminatas hasta el Cape Kidnappers o el Te Mata Peak.
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Una publicación compartida por New Zealand With Me (@newzealandwithme) el 19 sept. 2018 a las 11:57 PDT
El Monte Taranaki forma parte del Egmont National Park. Podrás rodearlo (¡y admirarlo!) con diferentes caminatas posibles en el parque o simplemente escalarlo. En el camino, haz una parada en la ciudad de New Plymouth donde podrás disfrutar del parque de Pukekura con su lago y sus jardines botánicos, así como su pequeño zoológico gratuito. No dudes en hacer el Coastal Walkway a pie o en bicicleta para recorrer estos 13 kilómetros a lo largo del mar.
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Una publicación compartida por New Zealand With Me (@newzealandwithme) el 13 oct. 2018 a las 11:35 PDT
Es obviamente imposible pasar por alto la capital de Nueva Zelanda: Wellington, aún más si tomas el ferry allí para ir a la isla Sur o si regresas allí. Entre mar y montaña, esta ciudad ofrece numerosas actividades tanto culturales, como el magnífico museo Te Papa o su famoso funicular, el Cable Car, como para los amantes de la naturaleza, como las diferentes caminatas para descubrir el paseo marítimo de la ciudad o Zealandia, un espacio natural que preserva la fauna y la flora neozelandesas.

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